lunes, 11 de marzo de 2013

PETRÓLEO EN LA PROFUNDIDAD DE LA TIERRA




PETRÓLEO EN LA PROFUNDIDAD DE LA TIERRA
 
Investigaciones que combinan datos geológicos con informes astronómicos dan pie para pensar que el petróleo no tiene un origen biológico o fósil y que es probable encontrarlo en las grandes profundidades de la tierra. Para todos es un dogma que el petróleo y el gas natural (que principalmente está constituido por metano) derivan de la degradación y transformación de compuestos biológicos. Según esto, la acumulación por miles de millones de años de restos de plantas y animales llegó a producir los hidrocarburos, producto de la degradación de esos fósiles. Desde que se formuló esta teoría, hace más de 100 años, a nadie se le ha ocurrido dudar de ella.
 
Es por esto que el petróleo se ha buscado sólo en la cresta superficial que cubre la Tierra. Según los físicos, la Tierra en un comienzo era una bola fundida y en la medida que se enfrió y comenzó la biología, se fue formando la cresta superficial que actualmente la envuelve. Según ello, no habría ninguna posibilidad de que los hidrocarburos existiesen en el interior de la Tierra.
 
Sin embargo, como siempre, ahora aparecen voces disidentes de este dogma y piensan que el petróleo puede no ser de origen biológico. Ello parece raro, porque son muchos los argumentos para pensar que sí lo es. Desde luego el petróleo está formado por moléculas complejas, que necesariamente tienen que haber sido sintetizadas por procesos biológicos (fósiles químicos). Más aún, algunas fracciones del petróleo muestran "actividad óptica", es decir, son capaces de rotar el plano de polarización de la luz polarizada. Para que esto ocurra, sus moléculas tridimensionales tienen que contener, en desigual proporción fracciones levógiras o dextrógiras (si están en igual proporción, estas fracciones del petróleo no tendrían actividad óptica). Es la actividad biológica la que produce estas asimetrías, en tanto los productos químicos no biológicos son siempre simétricos.
 
Sin embargo, hay cosas que no tienen explicación: La distribución geográfica del petróleo y sus depósitos encontrados es de tal magnitud, que difícilmente se puede concluir que derive sólo de sedimentos biológicos. La posibilidad de que los hidrocarburos no provengan de degradación biológica ha comenzado a fortalecerse cuando los astrónomos descubrieron que esas moléculas son un constituyente común de los planetas del sistema solar. Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno contienen en sus atmósferas enormes cantidades de metano. Titán, un satélite de Saturno, posee una atmósfera constituida por densas nubes de metano y etano. Los cometas y asteroides poseen en su estructura varios tipos de hidrocarburos. Ya los geólogos han abandonado la idea de que la Tierra se formó de una bola de roca líquida. Ahora sabemos que se estructuró de sólidos y que excreciones fundidas provenientes de la capa sólida formaron posteriormente su superficie. Según esto, no podemos descartar la posibilidad de que líquidos volátiles pudieran haberse concentrado en esta capa sólida y acumulada posteriormente en la superficie.
 
Seguramente el agua de los océanos y el nitrógeno de la atmósfera, como también otras sustancias volátiles, se originaron del mismo modo. El carbono es un elemento abundante en la superficie de la Tierra y también en los sedimentos (en formas oxidadas forman rocas carbonatadas y en forma no oxidada, forman el carbón y otros compuestos). Necesariamente el carbón debe haber llegado a la cresta de la Tierra proveniente de las capas profundas y es probable que lo lograra como dióxido de carbono y metano. En todo caso, en una atmósfera altamente oxidante, también puede haberse formado el anhídrido carbónico.
 
Los meteoritos constituyen muestras que nos llegan a la Tierra y que representan cuerpos planetarios semejantes a la etapa de formación de la Tierra. Por eso el estudio de su composición proporciona valiosos antecedentes. Entre los diferentes tipos de meteoritos hay una clase que interesa, los que contienen condritos carbonosos, responsables de la mayor parte del transporte de carbón a la Tierra. Al ser sometidos a fuertes temperaturas y presiones producen hidrocarburos líquidos, especialmente metano y una menor cantidad de anhídrido carbónico. Es probable que este carbón que fue adquiriendo la Tierra por este mecanismo, contribuya a explicar la gran cantidad de compuestos hidrocarbonados que son difíciles de entender sólo como provenientes de la degradación biológica.
 
Muchas veces las erupciones arrojan diamantes provenientes de las grandes profundidades de la Tierra. Los diamantes son en realidad una forma pura de carbón, que han necesitado una gran presión para poder formarse, la que se da sólo a una profundidad de por lo menos 150 kilómetros. Esto demuestra que existe allí carbón no oxidado en gran concentración. Se puede suponer que también existan otras formas de carbón no oxidado, como metano. De hecho, en los poros de los diamantes se ha detectado metano. Por mucho tiempo los geoquímicos pensaron que las elevadas temperaturas de las profundidades de la Tierra, disociarían el metano y otros hidrocarburos. Observaciones recientes contradicen estas suposiciones, ya que los cálculos de termodinámica moderna reconocen el efecto estabilizante de las enormes presiones que, además, existen allí.
 
Algunas de las características biológicas del petróleo, que hemos descrito (actividad óptica), se podrían explicar por una contaminación posterior de moléculas fósiles. Este proceso podría estar dado por bacterias que se sabe se alimentan de petróleo. De hecho, se han detectado en el petróleo algunos compuestos moleculares, llamados "hopanoides", que normalmente forman parte de las membranas bacterianas. Por estas razones, Robert Robinson, premio Nobel de Química 1947 y Presidente de la Royal Society, afirma: "actualmente no se puede ser enfático al afirmar que el petróleo derive de procesos biológicos. Iguales y valederos argumentos permiten afirmar también, que habría una mezcla de hidrocarburos primarios, los cuales se han contaminado posteriormente con productos biológicos".
 
Tal vez el mayor obstáculo para aceptar la teoría biológica lo constituya la asociación del petróleo con helio. Las partes de la Tierra que son ricas en petróleo y metano lo son también en helio. Sería muy difícil explicarse esta asociación si es que el petróleo tuviese un origen biológico. En ningún residuo biológico se encuentra helio, que es un gas inerte. En cambio es mucho más fácil explicar que el helio tenga el mismo origen que el metano y que derive de las profundidades de la Tierra y del universo...
 
 

2 comentarios:

  1. En 1997 se estrenó la Película "Fantasmas" (Actor: Ben Affleck) que narra como del interior de la tierra sale una entidad maligna y que esta compuesta, principalmente, por moléculas de petróleo...

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  2. Sería conveniente apuntar que este artículo fue publicado hace 27 años en la revista Creces en 1986 y está basado en la siguiente publicación que podréis encontrar en inglés, en google books.

    Gold, Tom: Oil from the Centre of the Earth. New Scientist, `1514, junio 1986, p. 42.

    Por favor, tomen con pinzas frases como: "Sin embargo, como siempre, ahora aparecen voces disidentes de este dogma y piensan que el petróleo puede no ser de origen biológico." y si les interesa este tema, busquen referencias más modernas.


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